Iván Vicario Martín
Quizá hemos exagerado un poco en la entradilla, pero lo cierto es que los 80 y los 90 fueron la época dorada de los utilitarios y compactos con carácter. Un buen ejemplo es nuestro protagonista, el Fiat Punto Grama 2 creado por Carrozzeria Maggiora y cuyo apodo no puede ser más elocuente: “Puntograle”. Y el mote no viene únicamente por las llantas de Lancia Delta HF Integrale, sino que incorporaba también la mecánica de éste. A todo se sumaba un ensanchamiento digno de un modelo de competición.
Carrozzeria Maggiora era un carrocero italiano de larga tradición, pues fue fundada como “Martelleria Maggiora” en 1925 por Arturo Maggiora. Desde entonces trabajó como algunas de las mejores marcas transalpinas como Alfa Romeo, De Tomaso, Fiat, Glas, Lancia o Maserati. A finales del siglo pasado, colaboraba con Fiat en el Barchetta o con Lancia en el Kappa Coupé.
Maggiora también se encargó, por ejemplo, de ensamblar la ediciones especiales del Lancia Delta HF Integrale Evo2. Quizá de aquí vino la inspiración para hacer una versión similar con el nuevo utilitario presentado por Fiat, el Punto, que había aterrizado en el mercado en 1993 como sustituto del Uno. En aquel momento, la versión más potente del Punto era el 1.4 GT de 133 CV, por lo que Maggiora decidió hacer algo al respecto.
FIAT PUNTO GRAMA 2, EL PUNTOGRALE
El resultado se vio en el Salón de Turín de 1994, donde el público asistente se vio sorprendido por un automóvil que era una mezcla entre un Fiat Punto y un Lancia Delta Integrale. Tomando como base el primero, ofrecía un aspecto que recordaba al gran dominador de los rallies desde la prohibición de los Grupo B. La primera muesca en su imaginario revólver eran unas llantas Speedline de 17 pulgadas inspiradas en las del “Deltona”.
Además, el Punto recibía un espectacular ensanchamiento de vías que se reflejaba también en la carrocería, que incluía una entrada de aire para refrigerar los frenos traseros. Por supuesto, el paragolpes delantero también se renovó a fondo, con antinieblas dobles y vanos para que el motor respirara mejor. Detrás, los paragolpes también cambiaban, al tiempo que se añadía un segundo spoiler bajo la luneta que se sumaba al del techo.
A destacar la moldura sobre el cristal lateral posterior, que buscaba recrear sin disimulo la línea del coche al que imitaba, el Delta Integrale. Por supuesto, el tapón del depósito de combustible imitaba a los de competición. Tampoco el color dejaba indiferente, pues se eligió un dorado de lo más singular, pero que quizá no remitía como el resto de los elementos al modelo icónico modelo de Lancia. ¿Y a qué venía semejante despliegue exterior? Pues resultaba imprescindible para acoger lo que se escondía bajo la piel del Puntograle…
UN MOTOR DE “DELTONA”
Si lo que se veía era espectacular, otro tanto sucedía con lo que no estaba a la vista. El Fiat Punto Grama 2 incorporaba la mecánica turbo de 1995 cm³ del primer Lancia Delta HF 4WD sobre el que se desarrollaron todas las versiones Integrale. Rendía 165 CV a 5.500 vueltas, con una cifra de par de 284 Nm. Además, también se adoptó la tracción total del modelo, lo que convertía a nuestro protagonista en un verdadero misil.
Por supuesto, el chasis se reforzó en diferentes puntos para soportar el aumento de prestaciones y de peso. Y es que en su momento se habló de que la potencia real del coche se iba hasta los 200 CV de potencia. En todo caso, Carrozzeria Maggiora sabía muy bien cómo llevar a cabo este tipo de trabajos, algo que se nota en el fantástico resultado final. La velocidad máxima se situaba en 220 km/h, mientras que tardaba poco más de 7 segundos en ponerse a 100 km/h desde parado.
Respecto al interior, es quizá la parte más decepcionante del Puntograle, puesto que apenas unas fundas en los asientos de color amarillo con laterales en azul le diferencian del modelo de calle. Equipa un volante de tres radios, un pomo distinto y controles del diferencial, todos ellos heredados del Delta Integrale, pero poco más.
PROYECTO CANCELADO
Lamentablemente, el Fiat Punto Grama 2 no terminó de concitar todo el interés esperado por parte de los posibles compradores. De esta forma, no se pudo lanzar como edición limitada, tal y como se estaba haciendo con los Lancia Delta HF Integrale Evo2. En su momento, se habló incluso de que fuese el arma del Grupo Fiat para regresar al Mundial de Rallies, toda vez que Lancia había abandonado la categoría en 1992. Dichos rumores tampoco cristalizaron.
Como pasó con el Fiat Punto Racer de Bertone, el Puntograle acabó convertido en ejemplar único y, desde entonces, ha cambiado de manos en más de una ocasión. En 2021, Evo Garage lo sacó a la venta por un precio de unos 46.000 euros, apareciendo un año después a un precio de 95.000 euros, en la que ha sido la última vez que ha habido noticias en torno a él. El coche mostraba un aspecto estupendo, lo que significa que ha estado muy cuidado todo este tiempo.
Imágenes de Carrozzeria Maggiora, Evo Garage y Lancia.
