Miguel Sánchez
Revisar la lista de ganadores del Rallye Safari durante sus primeras diecisiete ediciones es de lo más interesante. Y es que, hasta la creciente profesionalización de la prueba a partir de los Datsun del equipo oficial aparecidos en 1970, los más de los modelos ganadores fueron fiables automóviles de serie provenientes del segmento D. De esta manera, destaca especialmente el Peugeot 404 con sus cuatro victorias, tres de ellas consecutivas. Pero también un Ford Cortina e incluso un elegante y nada mesurado en su tamaño Mercedes 220SE. En suma, todos ellos vehículos tan sólo adaptados en materia de protecciones, depósito y suspensiones para disputar así una de las pruebas más duras jamás convocadas en la historia del automovilismo deportivo.
Así las cosas, tras haber hecho la mirada a la contemplación de según qué coches en circunstancias inesperadas, el Spain Classic Raid podría no sorprender tanto. No obstante, aún así es imposible no mirar dos veces algunas de las fotografías que de éste se desprenden. Para nosotros, la más hipnótica es la del Rolls-Royce Silver Dawn de 1950 vadeando alegremente un río. Una toma sorprendente, a la que siguen la de un SEAT 131 derrapando en una pista de tierra o la de un Marbella negociado tramos de nieve. Todas ellas verdaderos homenajes al espíritu de los grandes rallyes africanos. Donde la fiabilidad primaba más que la potencia para mayor gloria de marcas como Peugeot o Mercedes.
No obstante, los 150 que tomaron la salida del VIII Spain Classic Raid no tuvieron que desplazarse hasta Kenia para vivir emociones al bordo de sus clásicos. Lejos de ello, la salida se produjo en Santander el pasado 26 de marzo para llegar a Sevilla el 2 de abril. Después de haber recorrido 2.100 kilómetros por la Península Ibérica a través de ocho etapas marcadas por el barro, la lluvia y los charcos. Todo un desafío al aguante de los equipos. Pero también para la robustez de unas mecánicas expuestas a los rigores de la circulación por pistas de tierra. No en vano, el Spain Classic Raid es la prueba de regularidad sobre tierra con más kilómetros de entre todas las celebradas en Europa.
VIII SPAIN CLASSIC RAID, NO HACE FALTA SER TODOTERRENO
Si antes mencionábamos al Rallye Safari no es sólo porque algunas imágenes del Spain Classic Raid nos pudieron recordar a los tiempos clásicos de aquel. Sino también porque, al igual que en los grandes rallyes africanos, lo más importante no es tener tracción total o 4×4. Lo más importante es la constancia y la fiabilidad de las mecánicas. De esta forma, entre los tres primeros clasificados de esta octava edición vuelve a repetirse una tónica ya antes vista: la escasez de todoterrenos.
De hecho, el ganador de este VIII Spain Classic Raid ha sido un Audi 80. Quedando en tercer lugar un Peugeot 205 y sí, en segundo lugar un campero y adaptado Mitsubishi Montero. Un podio que vuelve a demostrar que, aún siendo una prueba sobre tierra, aquí tienen cabida todo tipo de clásicos independientemente de si tienen tracción delantera, trasera, total o 4×4.
Además, la contrastada organización del evento da facilidades y seguridad a los equipos. Contando con coches de asistencia entregados por Suzuki así como con el patrocinio de Bosch. En suma, una logística solvente al servicio del disfrute de la conducción fuera del asfalto. Ya estamos con ganas de ver qué depara la IX edición.
