Iván Vicario Martín
Nos trasladamos al 1 de marzo de 1984, momento en el que Peugeot descubre la versión primigenia del 205 GTI. Estaba motorizada con el propulsor XU5J de 1.580 cm3 y rendía 105 CV a 6.250 rpm, cifra de potencia que rápidamente se antojó un tanto escasa. Por poner un ejemplo, el Renault GT Turbo, uno de sus principales rivales, ofrecía 115 CV. Para solucionarlo, la marca del león puso en marcha este, hoy casi olvidado, Peugeot 205 GTI Kit PTS 125.
Peugeot ya estaba trabajando en versiones GTI más potentes que llegarían más adelante, pero, mientras éstas llegaban, tenía que encontrar una solución rápida. Y lo que hicieron fue tomar un camino que ya era cada vez menos habitual, como era el montar un kit para los compradores que así lo solicitaran. Es decir, estos llevaban su unidad de 205 GTI a un taller especializado, donde les montaban el citado kit. Algo similar ya se había hecho el Peugeot 505 Turbo Injection.
Por supuesto, el kit estaba homologado y además recibió un nombre de lo más seductor: PTS. Evidentemente, dichas siglas hacían referencia al cada vez más exitoso departamento de competición de la marca, Peugeot Talbot Sport. El 205 GTI alcanzaba así los 125 CV, cifra mucho más acorde con lo que se esperaba del pequeño León que, por otra parte, ya empezaba a despuntar en competición.
EN LAS MEJORES MANOS
Para desarrollar el kit, Peugeot contrató a Danielson, un reputado preparador experto en coches de competición y altas prestaciones. Su trabajo de circunscribió al motor, sin tocar ninguna otra parte del coche, ni chasis ni suspensiones. Es lógico si tenemos en cuenta que lo suyo era no complicar en exceso el montaje del futuro kit. Al fin y al cabo, se trataba de una solución temporal de emergencia.
Se modificaron la culata y el árbol de levas, adoptando válvulas de mayor tamaño. Además, y de cara a aumentar la relación de compresión, la junta de culta se hizo más fina, aunque también más resistente. Por el camino, se optimizaron la admisión y el escape. Los resultados fueron espectaculares, pues, con el kit montado, se obtenían 125 CV a 6.900 vueltas, con una cifra de par de 140 Nm a 4.800 rpm.
Las prestaciones estaban en consonancia, ya que pasaba de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos, cuando de serie no bajaba de los 9 s. La velocidad punta aumentaba de los 190 km/h originales a unos muy apropiados 205 km/h.
¿CUANTOS PEUGEOT 205 GTI KIT PTS 125 SE HICIERON?
Esa es la gran pregunta, pero no hay una cifra oficial. Originalmente, el contrato entre Peugeot y Danielson preveía una producción de 18.000 kits, pero realmente se desconoce cuántos se montaron. En algunos sitios, se habla de 1.800 ejemplares. No sé sabe cuántos hubo en España, donde también estuvo disponible el kit PTS. Lo que es seguro es que se trata de una rareza que da un plus a la unidad que lo equipa.
Lo que está claro es que la conversión, que costaba 15.000 francos de la época -2.300 euros-, merecía y mucho la pena. Si se montaba en un taller oficial de la marca, se ofrecía con una garantía de un año. Además, se instalaba una placa identificativa. Estuvo a la venta en 1985 y 1986, momento en el que llegó al mercado la versión del 205 GTI de 115 CV, aún con el motor 1.6.
