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Galería: el Mustang Bullitt, el más deseado de todos

Es posible que Steve McQueen y el Ford Mustang labraran su leyenda juntos, y que lo hicieran e la película Bullitt, protagonizada por el actor americano y un Mustang GT 390 Fastback.

Bullitt se estrenó el 17 de octubre de 1968 en USA, con un reparto de lujo: Steve McQueen, Robert Vaughn y Jacqueline Bisset. Estaba dirigida por Peter Yates y es la primera película de la historia rodada íntegramente en exteriores. Aunque entre los aficionados al motor, Bullitt siempre será recordada por la trepidante persecución que protagoniza Steve McQueen encarnando a Frank Bullitt a los mandos de su Mustang GT 390 Fastback.

Fue McQueen quien estuvo al volante de una escena que son 9 minutos y 20 segundos de pura adrenalina. Se cuenta que Ford no quiso ceder ningún coche para el rodaje de Bullitt y que, Steve McQueen, cabreado, ordenó que se eliminaran todos los logotipos del coche. La idea era no dar publicidad a la marca, pero al tiempo se consiguió un Mustang con una estampa única e icónica. Se usaron dos unidades de Ford Mustang GT 390 Fastback, aunque ligeramente modificadas para ganar potencia.

LA AZAROSA VIDA DEL MUSTANG BULLITT

Sólo uno sobrevivió al rodaje -luego se descubrirían los restos del otro-, que fue adquirido por Robert M. Ross en 1970, un empleado de la Warner. Éste se lo vendió después a Frank Marranca, un policía, quien lo puso a la venta en 1974. Pasó entonces a manos de Robert Kiernan, su propietario durante largo tiempo. Incluso el propio Steve McQueen intentó recuperarlo, pero Kiernan se resistió. Dejó de usar el coche en 1980, y no fue hasta 2001 cuando se propuso restaurarlo junto a su hijo Sean. Robert fallecería en 2014 sin ver completada su labor.

Sean Kiernan decidió terminar la restauración como homenaje a su padre, y el Mustang Bullitt de Steve McQueen volvió a rugir de nuevo el 4 de julio de 2016. Su presentación al público fue en el Salón del Automóvil de Detroit de 2018 junto a nuevo Mustang Bullitt Edition. En 2020, el coche fue subastado por la casa Mecum, bajando el mazo en unos increíbles 3,74 millones de dólares, lo que le convierte en el Mustang más caro jamás subastado.

GALERÍA: MUSTANG GT 390 FASTBACK BULLIT

Fotos Ford Media y Mecum Auctions

El modelo original era un Mustang GT 390 Fastback de 1968.

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Escrito por Iván Vicario Martín

Tengo la suerte de haber convertido mi pasión en mi forma de ganarme la vida. Desde que salí de la Facultad de Ciencias de la Información en 2004 me dedico profesionalmente al periodismo del motor. Arranqué en la revista Coches Clásicos en sus inicios, pasando a dirigirla en 2012, año en el que también me puse al frente de Clásicos Populares. A lo largo de estas casi dos décadas de carrera profesional he trabajado en todo tipo de medios, incluyendo revistas, radio, web y televisión, siempre en formatos y programas relacionados con el motor. Me vuelven loco los clásicos, la Fórmula 1 y las 24 Horas de Le Mans.

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